sábado, 16 de mayo de 2020

Un aspie en cuarentena.

Aqui en reclusión.
La verdad es que mi vida en cuarentena es prácticamente igual que sin cuarentena.
Casi no salgo, metido en mis cosas, rutina total.
La diferencia es que ahora el mundo me dice que esa manera de vivir es la correcta.
Supongo que muchos aspies estamos en las mismas circunstancias.
Probablemente, el estar aun más recluidos ayuda a que se aumenten nuestras obsesiones.
En mi caso, lo reconozco, estoy obsesionado con el tema de la pandemia y devoro cuanta información se publica al respecto, una nueva fijación... que no disminuye para nada las anteriores.
Supongo que el hecho de vivir donde vivo es un elemento básico para la normalidad en medio del caos pandémico.
Me preguntaba, y si, en mi condición de aspie, viviera en un ambiente en el que no me sintiera feliz?
Eso si debe ser una legítima pesadilla, no imagino el grado de stress y angustia de los aspies en condiciones desfavorables, encerrados donde no quieren estar.
Ojalá las personas que comparten con ellos entiendan esto y les ayuden a tranquilizarse.
Despertarles nuevos intereses, buscar, hasta donde sea posible, formas de relajamiento, tal vez alguna salida aunque sea pequeña, alguna novedad en las cosas que más les interesan, en fin, lo que sea que les baje el stress y evite que colapsen en sus angustias.


miércoles, 16 de octubre de 2019

JELOUUU


El bichillo regresa, otra vez a joder recalcitrantemente contra nuesta antiaspie y poco inclusiva sociedad

jueves, 4 de febrero de 2016

DE PERROS, GATOS Y ORNITORRINCOS!



Dado unos posts de un foro aspie,  hablaba con mi esposa, como solemos hacer, respecto a esta condición que nos caracteriza tanto a mi hijo como a mí. 


Esa conversación, junto con un programa que  medio mirábamos en Animal Planet, me llevó a proponerle una forma respecto a cómo veo yo el ser aspie en un mundo neurotípico. Se me ocurrió, viendo una manada de lobos,  comparar a nuestra sociedad con una manada de perros.

Cuando los perros están en manada establecen patrones conductuales muy propios de ellos, existe un esquema social fuertemente definido en sus roles, una percepción de los estímulos propia de su especie, como lo que representa comida, peligro, juego y esta percepción, unida a sus instintos y respuestas aprendidas, condicionan la forma en que ellos captarán, interpretarán y responderán a los estímulos de sus semejantes y de su ambiente.
Existe todo un lenguaje compuesto por expresiones sonoras, como el ladrido, lloriqueo, aullido y gruñido, junto con toda  una gama de señales no sonoras que al rato son aun más significativas, como la exposición corporal (incluida la muy conocida costumbre de deleitarse con aromas de trasero), posiciones de dominio, de sumisión, alegría o agresión.
De hecho, muchas personas, como el muy conocido Cesar Millan, han dedicado su vida a entender e interpretas dicho lenguaje canino y mejorar su interrelación con los humanos.
Obviamente todas esas conductas, ruidos y señales tienen sentido en la sociedad canina y en gran parte determinan su cohesión y funcionamiento.
Ahora imaginemos lo “inimaginable”, de un momento a otro, en este feliz contubernio canino, aparece un extraño…UN GATO!!!
Es de suponer el shock para ambas partes, incluso el conflicto que puede presentarse.
El no ve el ambiente como los perros, no procesa igual los estímulos, no entiende absolutamente nada de los que le rodea, las señales y mensajes de los perros, a menos que sean demasiado claras, como una agresión por ejemplo, no tendrán para él ningún significado específico e incluso estoy casi seguro que no estará demasiado dispuesto a oler traseros de perro.
Los perros son mayoría absoluta, por lo que para ellos el gato es “anormal”, no calza para nada en su sociedad y no estarán dispuestos a cambiar, por lo que es muy posible que el gato sea agredido o aislado, convirtiéndose en un paria social.
Pensemos en que los perros no matarán al gato!!!
Qué seguirá entonces?                                                             
Pues lo lógico, el gato, poco a poco, empezará a interpretar los comportamientos caninos y a responder en una forma que se adapte mejor al comportamiento de la manada, con lo cual logrará integrarse mejor, minimizar el conflicto y, si tiene suerte, incluso hacerse entender de vez en cuando.
Pero debemos ser claros, por más que el gato se adapte sigue siendo un gato, jamás será un perro!!
Por más que la manada lo trate de forzar a pensar y actuar como ellos, lo más que lograrán serán respuestas aprendidas y memorizadas porque el gato será gato eternamente y no podría, ni aunque así lo quisiera, cambiar su felina naturaleza.
La manada seguirá su vida, poco le importará el gato y al gato no le quedará más que tratar de facilitarse él mismo las cosas para no tener una “vida de perros” entre perros.
Pues es igual con los aspies, venimos al mundo NT cargados de un diferente set de códigos y al igual que el gato, no nos queda más remedio que tratar de comprender lenguajes que no son los nuestros, siempre conscientes que el hecho de hacerlo no nos cambia un ápice y que siempre seremos lo que somos y deberemos convivir en una sociedad que nos cataloga como “anormales” por el simple hecho de no ser perros.


miércoles, 3 de febrero de 2016

El bichillo va a la escuela - el día



Y llegó el gran día, entrada a clases.


Probablemente mami y papi nos levanten llenos de emoción, nos pregunten si estamos igualmente emocionados y felices

Esteee… NO!!

Otra vez nos sacarán de nuestra cómoda existencia para enviarnos a ese ambiente estandarizado lleno de personas que en el mejor de los casos nos importan un pepino.

Probablemente trataremos de poner nuestra mejor cara para que nuestros amados y abnegados progenitores se sientan bien, pero en el fondo sabemos que el ambiente escolar es normalmente un ecosistema 

Ahí es donde más necesitaremos de su apoyo y comprensión, tampoco es que todo sea malo, pero casi siempre para nosotros el ambiente escolar general si los es y de poco valen los consejos de tratá de hacer amigos, participá en su actividades. Para nosotros simplemente no es así como funciona, claro que probablemente habrá un par de compañeros a los que consideraremos amigos y que nos alegrará legítimamente volver a ver, pero también estarán nuestros némesis con los que tendremos que lidiar de nuevo, todos rodeados por una masa de personajes que realmente no significan nada en nuestras vidas. 

Con que nadie nos moleste y pasemos así el año estaremos más que bien.

Pero también está el lado positivo, tendremos lecciones de biología, física, química, matemáticas, ciencias en general, materias que casi siempre nos encantan y que al recibirlas hacen desaparecer el ambiente exterior y nos sumergen en un mundo donde nos sentimos como pez en el agua.

Probablemente los aspies somos los únicos estudiantes en el mundo que podemos considerar simpático al profesor de matemáticas!!

Así que tranquilos padres, nada más apoyen y vigilen que es muy difícil que lleguen a vernos echando porras por el regreso a clases, aunque al rato podamos legítimamente disfrutar del aprendizaje

El bichillo va a la escuela - los preparativos




La entrada a clases, momento crucial todos los años, que, para muchos de nosotros tiene ciertos tintes particulares que no dan una percepción distinta a la de los muggles. Haré un relato de cómo veo el asunto, mezcla de recuerdos y presunciones de cómo sería si me tocaras hacerlo hoy.
Les cuento porque no me extrañaría que muchos padres se salgan de sus casillas dado que sus aspitos pondrán peros a todo, se comportarán en forma obsesiva, o simplemente negativos ante sus criterios.
Paciencia, recuerden que vemos todo con otros matices, traten de comprenderlos y tenerles paciencia.

LOS UNIFORMES:
La verdad es que los uniformes, al fin y al cabo son excelente invento para un aspie, nos releva de pensar todos los días respecto a la ropa que usaremos, o mejor dicho, a ponernos lo que sea sin pensar mucho en ello, labor que comúnmente termina en que nos vistamos con combinaciones “caja fuerte” (solo nosotros la sabemos), con ropa repetida, desgastada, manchada y hasta rota (siiii, nuestra favorita!).
De todas formas, si elegir la ropa para ir a clases fuera nuestra tarea, al final probablemente llegaría nuestra propia Fashion Police… en forma de madre, y nos obligaría a cambiarnos por ropajes más convenientes y apropiados, los cuales invariablemente serán incómodos y absurdos para nuestros aspies ojos.
Asì que benditos uniformes que nos ahorran el aparecer en público con nuestras extravagantes vestimentas y que también, de algún modo, nos ayudan a mezclarnos mejor con la multitud y alcanzar más fácilmente una de las principales metas sociales de un aspie: no llamar la atención para que nadie se meta conmigo!
Pero no crean que todo es así de fácil, somos aspies, no nos interesa la ropa, pero, si debemos usar el uniforme todos los días, podemos volvernos sumamente obsesivos y exigentes con el mismo.
LOS ZAPATOS:
Primero recordemos algo, un aspie puede ser la máxima autoridad en su campo y hasta rozar la genialidad, pero… ASPIE QUE SE RESPETA NO SABE AMARRARSE LOS ZAPATOS!!!
Si me enseñan un aspie que lo haga bien es porque está trucado.
Cómo deseaba yo que mi madre me comprara zapatos sin cordones, pero noooo, era maestra y como tal seguía el código zapatístico de los educadores: “zapatos de amarrar”, lo que en un aspie tendrá siempre el mismo resultado: “cordones desamarrados”, con algún probable topetazo al cemento de vez en cuando producto del ocasional tropezón.
LOS ÚTILES:
La mejor parte, que entretenido es comprar los útiles, nuevos, relucientes, los maravillosos juegos de geometría, lápices y lapiceros nuevecitos, borradores, lápices de colores.
Sacarlos de sus empaques y ponerlos en algún orden, siempre nosotros y la manía de usar patrones para todo.
Saben que es lo más frustrante que puede pasar?
Que se quiebre la punta de uno de nuestros lápices de colores nuevos, antes del primer día de clases. Eso implica sacarle punta nuevamente, o sea, irremediablemente quedará más corto que los demás con lo que tooodoooo el paquete se ha arruinado sin remedio.
Tenemos los libros, estén seguros que correremos a los de ciencias y matemática a ver los temas y si hay ilustraciones aún mejor.
Y los cuadernos, probablemente querremos que tengan un solo tema, sean de la misma marca, mismo tipo de empaste, pero es solamente nuestra expectativa, la verdad es que los maestros y profesores son unos expertos en arruinar lo que podría ser una gloriosa colección académica, todos piden cuadernos diferentes, es que no pueden ponerse de acuerdo?
La “forrada” de cuadernos, eso si puede ser obsesivo, sobre todo si utilizamos plástico autoadherible, el forro debe ser perfecto, cualquier fallo significa fracaso.
Por último las etiquetas, tiene por supuesto que tener un mismo tamaño, una misma temática, un mismo tipo de letra y lo peor, debemos buscar un lugar en todos nuestros libros y cuadernos, de tal forma que podamos dar la misma ubicación relativa a todas, sin cubrir los títulos ni la ilustración principal.
Así que paciencia padres y apoyo a sus aspitos

lunes, 14 de diciembre de 2015

Vuelve la Navidad a Aspielandia – el lado alegre


Vuelve la Navidad a Aspielandia – el lado alegre


Así como esta época  puede ser muy triste para algunos aspies, puede ser tremendamente alegre para otros, y es que nosotros, tal vez por nuestro mismo carácter obsesivo, cuando nos enrolamos en el Espíritu Navideño, lo disfrutamos muchísimo más que la mayoría de las demás personas.

Enloquecemos con la música, los regalos, la decoración, los regalos, las comidas. Los regalos, el ambiente, los regalos y también con los regalos.

Supongo que lo único que tratamos de natural de evitar son las aglomeraciones de gente, por lo que preferimos disfrutar en nuestras casas o con algunos amigos cercanos, mucho más que en los eventos masivos, aunque pueden fascinarnos si los vemos por televisión.

Las decoraciones, las decoraciones son algo especial, tenemos un lugar para cada cosa, cada adorno del árbol tiene su lugar propio por derecho, cada luz está predestinada a ocupar su lugar hasta el día que deje de encender, en fin, lo que consideramos un “perfecto plan de decoración navideña”

Y los regalos, no debemos olvidar los regalos, nunca, bajo ninguna circunstancia, quieran agradar a un aspie con un regalo de lo que los neurotípicos consideran útil, tales como ropas o perfumes, eso probablemente no nos hará ni el mínimo de gracia y es muy probable que te lo expresemos claramente, debemos recordar que no manejamos la hipocresía.

Si nos quieren quedar bien de verdad, averigüen cuales son nuestros intereses y dennos algo relacionado, por ejemplo, en mi caso me quedan mejor con unas maracas de tres mil colones que con una camisa de treinta mil. Y si no se les ocurre nada, algo tecnológico o simplemente curioso puede ser la solución perfecta.

Pero lo más importante de todo es que no se nos obligue a comportarnos como se supone se comportan los demás, por más felices que estemos, seguimos siendo aspies y puede ser que necesitemos periodos de calma o hasta de soledad, que por ratitos nos sintamos recargados y busquemos alejarnos un poquito, pero que eso no te preocupe, estamos bien así, pronto volveremos y de nuevo daremos rienda suelta a la fiesta … a nuestra manera

FELIZ NAVIDAD!!!

GOD BLESS US, EVERY ONE!!!  (Tiny Tim)

Vuelve la Navidad a Aspielandia – el lado triste


Vuelve la Navidad a Aspielandia – el lado triste



La Navidad, época lamentablemente muy difícil para algunos compañeros aspies. Sabemos que es común encontrar aspies que viven muy solos y aislados, incomprendidos por una sociedad poco inclusiva y en ocasiones, incluso cruel que los ha relegado a un doloroso anonimato, el cual se siente aún más pesado en esta época, donde la mayoría gozan rodeados de sus seres queridos e inmersos en el festivo ambiente social propio de estos días festivos, contrastando con la soledad que el “excentricismo” propio de esta modalidad de pensamiento que se ha dado en llamar Síndrome de Asperger parece acarrear como parte integral de su simple existencia, aquella máxima social de rechazar todo lo que le parezca diferente, extraño, raro, solamente por el hecho de no corresponder a un estándar social fijado por la mayoría, simplemente por ser mayoría.

A estos mi solidaridad y la esperanza siempre presente de que, a partir de nuestra lucha diaria por informar, educar y convencer, podamos cada día derribar una nueva barrera y vayamos abriendo a golpes una brecha que nos permita a todos ser aceptados por lo que somos y como somos.

FELIZ NAVIDAD!!!

NO ESTAMOS SOLOS